Los municipios ribereños piden al Gobierno una lámina mínima de 990 hm3 en los pantanos de cabecera

La Asociación de Municipios Ribereños de los Embalses de Entrepeñas y Buendía han pedido una lámina mínima de 990 hectómetros cúbicos en los pantanos de cabecera para satisfacer las necesidades del Tajo y su comarca y que se cumpla la ley y se respeten las necesidades de la cuenca cedente.

En un comunicado, el presidente de la asociación, Francisco Pérez Torrecilla, ha realizado esta propuesta ante la reunión de la Comisión de Explotación del trasvase Tajo-Segura, que debe analizar las reservas de agua en los pantanos de cabecera y determinar, si procede, un trasvase.

En cambio, la asociación ha pedido al Gobierno central que "la solidaridad cambie de sentido".

"Llevamos décadas siendo solidarios, ya es hora de que el Gobierno lo sea con nosotros y decida hoy no trasvasar", ha explicado Pérez Torrecilla quien ha afirmado que los municipios ribereños "llevan cuarenta años siendo solidarios con el Levante a costa de haber sacrificado su propia economía y desarrollo para generar riqueza en otra región".

Por ello, ha argumentado que los municipios ribereños reclaman que "se haga lo propio con ellos y se les permita recuperar los embalses y, con ellos, su fuente de ingresos".

"La solidaridad tiene que ser del rico para con el pobre, no al revés", ha agregado.

Por ello, ha considerado que si se quiere llegar realmente a un pacto del agua, se debe comenzar garantizando un mínimo de 990 hectómetros cúbicos en los embalses de cabecera, "un paupérrimo 40 por ciento que por lo menos permita garantizar cierto desarrollo de los municipios ribereños y la supervivencia del Tajo".

Pérez Torrecilla, sin embargo, no renuncia a poner fin al trasvase, pues ha planteado que el Levante "debe aprender a sobrevivir con el agua de las desaladoras y racionalizando sus cultivos, "sin fagocitar los recursos del Tajo o los del Ebro".

"Si queremos ser realistas, primero necesitamos recuperar poco a poco todo lo que hemos perdido estos años; 990 hectómetros cúbicos podría ser una cifra, aunque escasa, razonable para garantizar la supervivencia del Tajo y de nuestra comarca", ha explicado.

"Queremos volver a la mesa de negociación de la que incomprensiblemente no forman parte ni los ribereños, ni las comunidades de Castilla-La Mancha, Madrid o Extremadura, pero sí los regantes del Scrats o las comunidades de Murcia y Valencia", ha concluido.