Regadíos y Abastecimientos

Las organizaciones agrarias alertan de la pérdida de 12.000 empleos si no hay garantías de agua

miércoles, 24 de agosto de 2016

Trabajadores campoFotoCCOO 1


Los agricultores murcianos calculan que el campo podría perder hasta 12.000 empleos  si no hay garantía de agua para la campaña de otoño, a lo que habría que sumar un parón en las plantaciones y cultivos, además de las consecuencias que tendría para la industria auxiliar al sector primario regional.


Por ello, insistieron en la necesidad de dotar de contenido a la ampliación del decreto de sequía que se está tramitando actualmente en el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (Magrama), con medidas como un riego de socorro, la compra de agua a otras comunidades de regantes o la apertura de pozos de sequía, dando soluciones en lugar de "criminalizar" el sector.


Así se lo expusieron al secretario general de los socialistas murcianos, Rafael González Tovar, con quien se reunieron para trasladarle la realidad del campo regional. En este sentido, el presidente de la Federación Regional de Cooperativas Agrarias (Fecoam), Santiago Martínez, abogó por que las comunidades de regantes "puedan negociar directamente" unas con otras, sin intervención del ministerio, en la compra de agua.


Por su parte, el presidente de COAG en la Región de Murcia, Miguel Padilla, advirtió de la "situación gravísima" de falta de agua, lo que está generando una gran incertidumbre a la hora de planificar la campaña de otoño, al tiempo que criticó que el cierre de pozos en el campo de Cartagena "se haya hecho con una rapidez extrema incomprensible", cuando son ahora mismo la única solución que tiene la zona por la falta de dotaciones que padece.


Desde el PSOE-RM, Rafael González Tovar aseguró que el sector agrario está pasando por un momento de extrema necesidad que exige respuestas de emergencia, por lo que “no se puede marear más la perdiz en cuanto a la compra del agua”.En su opinión, la puesta en marcha de los bancos de agua es una necesidad, “y conforme va avanzando la sequía, se está manifestando de forma más cruda”.


Igualmente, González Tovar apuntó que no tiene sentido que haya comunidades de regantes dispuestas a hacer aportaciones y otras dispuestas a comprar agua, y sin embargo, se pongan trabas administrativas. “El Ministerio de Agricultura de Rajoy no asume su responsabilidad, ni entiende el problema del agua en Murcia”, agregó.


González Tovar insistió en que se trata de una situación de extrema gravedad de sequía, por lo que es necesaria una nueva aportación del trasvase con un riego de socorro, ante el riesgo de que las cosechas y los árboles sufran de manera irreparable.


“La situación de ahora no es normal, y por lo tanto se tienen que tomar medidas muy excepcionales, acciones que deberían estar haciendo el ministerio y la Confederación Hidrográfica del Segura, “pero ambos están en una posición de indolencia absolutamente denunciable”, apostilló.


González Tovar ha señalado que en toda la Región se está viendo agudizado el problema de la sequía y que debería plantearse la reapertura de pozos de emergencia, en vez de estar cerrándolos pues, a su juicio, "es una contradicción que en los momentos más delicados, en los que más hace falta estas actuaciones de emergencia, sea precisamente cuando se cierran”.


Al respecto, eximió de responsabilidad a los agricultores, porque llevan 20 años utilizando sus pozos, “los cuales no ha habido voluntad alguna de regularizar, y ahora, por una presión en cuanto a la turbidez de las aguas del Mar Menor se ha buscado a alguien que pague los platos rotos”. “Los agricultores han mostrado su total disposición para aportar soluciones a los problemas del Mar Menor y a que estas soluciones sean de raíz, permanentes y no de cara a la galería”, añadió.


Finalmente, González Tovar señaló que hay estructuras, como las desalinizadoras, que no se están aprovechando al 100 por cien. “Al PP se le olvida que lleva casi cinco años gobernando y que tendría que haber finalizado las últimas fases de las desalinizadoras, como las balsas de impulsión en la zona de regadío de Lorca y el Valle de Guadalentín, que están sin hacer”, concluyó.



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