Agentes de la Policía Nacional han detenido a diez personas como presuntos autores de los delitos de usurpación del estado civil, contra los derechos de los trabajadores y favorecimiento a la inmigración ilegal, al utilizar a personas extranjeras en situación irregular para trabajar en explotaciones agrícolas. Los trabajadores usurpaban la identidad de compatriotas con permiso de trabajo y residencia para poder acceder al trabajo.
A primeros de septiembre, la Unidad contra las Redes de Inmigración Ilegal y Falsedad Documental (UCRIF), de la Jefatura Superior de Policía de la Región de Murcia, tuvo conocimiento, a través de una denuncia, de la posible usurpación de identidad realizada entre emigrantes con tarjeta de residencia y trabajo que estarían prestando a compatriotas en situación irregular las tarjetas referidas para poder trabajar ya que dada su situación de irregularidad administrativa no podrían hacerlo.
Tras la debida investigación se efectuaron nueve detenciones por usurpación del estado civil. Por posteriores pesquisas la Policía Nacional tuvo conocimiento de la existencia de un ciudadano boliviano, quien se dedicaba al transporte de extranjeros desde la ciudad de Murcia hasta diferentes explotaciones agrícolas de la Región y Almería.
Esta persona, carente de habilitación para el transporte de trabajadores, era la encargada de buscar trabajo a personas en situación irregular y les instaba a que usurparan la identidad de compatriotas suyos legalmente residentes y trabajadores en España para poder así acceder al puesto de trabajo.
Dado que en el último año se han producido en nuestra Región varios accidentes in itinere con resultados de muerte en el que se han visto implicados varios “furgoneteros” que transportaban a trabajadores hasta las explotaciones agrícolas sin estar habilitados para ello, se centró la investigación sobre este ciudadano boliviano que además presuntamente favorecía la inmigración ilegal. El pasado mes de noviembre se procedió a su detención.
Las diez personas detenidas, con edades comprendidas entre los 26 y los 63 años, son de diversas nacionalidades: España, Mali, Bolivia, Senegal, Gambia, Ghana y Chad, según informaron fuentes policiales. Esta investigación ha sido desarrollada por la Brigada Provincial de Extranjería de la Jefatura Superior de Policía de Murcia.
