La ONU pide volver a dar valor a las aguas residuales en la agricultura

La ONU ha pedido en Roma volver a dar valor a las aguas residuales en la agricultura, sector en el que se pueden utilizar las sustancias contaminantes como nutrientes o como fuente de energía. La subdirectora general de la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), Maria Helena Semedo, destacó en un acto con ocasión del Día Mundial del Agua que las aguas residuales "deberían verse como un activo" maximizando su potencial.

Esos recursos tendrían que "usarse de una manera más productiva sin que se comprometa la calidad del agua", aseguró la responsable, que reclamó más innovación tecnológica e inversiones a largo plazo para lograrlo.

Alrededor de 1.000 millones de personas en zonas secas sufren escasez de agua a nivel global, mientras que las extremas sequías están actualmente poniendo en peligro la seguridad alimentaria en países como Etiopía, Kenia o Uganda.

En su informe anual sobre el desarrollo de los recursos hídricos, la ONU sostiene que más del 80 % de todas las aguas residuales domésticas, agrícolas e industriales se vierten sin ser tratadas, especialmente en los países en desarrollo, donde se aplica tratamiento a un 8 % del agua empleada.

La coordinadora del programa de evaluación del agua de la UNESCO, Michela Miletto, sostuvo que la agricultura (que consume el 70 % del agua dulce) podría aprovechar más las sustancias contaminantes que se eliminan en el tratamiento de aguas residuales.

Esos desechos sirven como nutrientes para fertilizar los suelos y como biocombustibles también se pueden destinar a la generación de energía, una función "poco explotada", según Miletto, para quien el agua "gana valor con su recuperación".

Apuntó que las aguas recicladas se pueden reutilizar para el riego, la recarga de acuíferos, la industria y, cuando tiene la mayor calidad, incluso como agua potable.

El agua también se emplea a lo largo de la cadena alimentaria, en tareas como el procesamiento o la limpieza de los productos, por lo que se necesita estar al corriente de los riesgos y llevar a cabo un manejo adecuado en cada momento, según las directrices de la FAO.

La jefa de Medioambiente del Banco Europeo de Inversiones, Monica Scatasta, citó la débil regulación ambiental o las dificultades para controlar a la industria entre los motivos por los que sigue habiendo problemas de seguridad con el agua y animó a promover aquellos mecanismos financieros y empresas que den resultado. EFEAGRO