El Scrats respalda con un informe técnico nuevos trasvases para 500 hm3 de Tajo, Ebro y Duero

El Sindicato Central de Regantes del Acueducto Tajo-Segura ha respaldo con un informe técnico, elaborado por la consultora en ingeniería y arquitectura Sers, la necesidad de nuevos trasvases de agua como solución al déficit estructural de la cuenca del Segura. En total, el estudio cifra en 500 hm3/año el volumen objetivo a conseguir, incluyendo además del regadío los abastecimientos en precario del Sureste.

En cuanto a las zonas de procedencia, el informe apunta varias alternativas, como el Duero Medio o el Ebro Medio hasta Entrepeñas, el Ebro desde la desembocadura como recogía el Plan Hidrológico Nacional, el Tajo Medio desde la presa de Azután, o desde aguas abajo de Toledo hasta La Roda.

Al respecto, el presidente del Scrats, Lucas Jiménez, incidió en que "no nos corresponde a nosotros decidir qué medida habría que adoptar", ya que "vamos a trasladar este estudio al Ministerio de Agricultura, a ser posible a su titular Isabel García Tejerina, para que sean los técnicos los que aborden esta cuestión". 

No obstante, reconoció que este asunto tiene un marcado cariz "político y socioeconómico" que va a ser imposible dejar a un lado. Pese a ello, insistió en que las soluciones propuestas "son ambiciosas, pero solidarias", pues "queremos traer la calma no solo a la cabecera del trasvase, sino aglutinar las necesidades de las tres provincias, con el fin de acabar con el déficit estructural de la cuenca del Segura".

"Cualquier solución posible ha de venir de la mano de la Administración del Estado", apuntó Jiménez, quien añadió que "siempre habíamos supuesto que la solución era un trasvase, lo dábamos por hecho, pero ahora lo constatamos científicamente".

En este sentido, explicó que "después de analizar todo el documento, después de echar mano a todos los recursos no convencionales, esto sólo se remedia con un aporte externo, con un nuevo trasvase, pero no somos nosotros los que debemos decir la solución más idónea para el Sureste español". "Cualquiera de ellas es técnicamente factible", agregó.

A juicio de Jiménez, "es fundamental que toda la sociedad sea consciente del problema tan gordo que tenemos encima de la mesa y que apoye esta idea con vehemencia", al tiempo que recordó que "estamos en la mayor crisis del acueducto Tajo-Segura, marcada por la entrada del nivel 4, que implica el 'trasvase cero', y añadiendo a esto la mala situación de la cuenca del Segura", lo que está traduciendo en problemas en el campo, como la falta del segundo ciclo en las rotación de cultivos de hortícolas, o la merma de las hectáreas de leñosos por la escasez de agua.

"El ATS afronta la peor crisis de agua de su historia. La riqueza socioeconómica de la huerta de Europa está en riesgo", advirtió Jiménez, quien detalló que el estudiando plantea dos tipos de actuaciones: a corto plazo, para paliar significamente el problema, y a largo plazo, para resolverlo definitivamente.

Respecto a las actuaciones en la cuenca del Segura, ninguna de las propuestas "tiene capacidad por sí sola para resolver el problema", siendo la única alternativa de aporte de volúmenes significativos el incremento de la producción de la desalinizadoras existentes (Torrevieja, Valdelentisco y Águilas). Las extracciones de los acuíferos subterráneos son para toda la cuenca, por lo que su asignación no es exclusiva al ámbito de los regantes del trasvase.

En cuanto a las actuaciones de fuera de la cuenca, el informe habla de "considerar multitud de alternativas basadas en agua procedente de la cesión de recursos de cuencas hidrográficas limítrofes, de derivación en precario de recursos asignados temporalmente ociosos, y del trasvase de recursos excedentarios de otras cuencas hidrográficas".

Precisamente, y sobre la posibilidad de un trasvase desde el Júcar, apuntó que se trataría de una opción a medio-largo plazo por la que los regantes del Scrats podrían usar recursos que actualmente no se usan y que no tienen asignación, por lo que van al mar. "Entendernos entre regantes es posible, pues en otro tiempo llegamos a entendernos con los del Ebro", rememoró Jiménez, quien mostró su apoyo a los regantes del Duero "que están sufriendo una situación de sequía que nos entristece y nos solidarizamos con ellos".

 "TACTO Y MIMO"

En este sentido, el presidente del Scrats se refirió a las declaraciones de la ministra de Agricultura, Isabel García Tejerina, en las que restó importancia a la sequía que sufre el Sureste, reconociendo que existe un "gran malestar" entre los regantes del trasvase, hasta el punto de que fue uno de los asuntos más comentado en la Junta de Gobierno del sindicato, celebrada previamente a la rueda de prensa.

"Creo que no se puede condenar a nadie por una frase, pero la ministra de equivocó" al comparar una sequía coyuntural en el Duero con una estructural en el Segura, consideró Jiménez, para quien "las comparaciones son odiosas y en este caso hirientes para los regantes del Tajo-Segura, que es un enfermo con medidas paliativas". "No estuvo bien, es un error y esperamos que el ministerio trate con más mimo o tacto las declaraciones" que realiza, apostilló.

Preguntado por la postura antitrasvasista de Castilla-La Mancha, Jiménez estimó que el gobierno de esta comunidad autónoma "interpreta un papel, que es el de oponerse a los trasvases, tengan o no sentido de ser".

Finalmente, Jiménez pidió, en nombre de las tres entidades que administran el agua en la Región de Murcia --la Junta Central de Usuarios, la Junta de Hacendados y el Scrats--, ser tenidos en cuenta en las reuniones que se están manteniendo para lograr un Pacto Regional del Agua. "Queremos estar presentes, ser escuchados, y que se nos tenga en cuenta en la tramitación", defendió Jiménez, quien se mostró convencido de que así será por lo "razonable" del planteamiento.