Los precios agrícolas de la Unión Europea (UE), tanto de los productos como de los insumos no relacionados con la inversión, disminuyeron en el tercer trimestre del año, lo que confirma el cambio de tendencia tras el fuerte aumento de los costes en 2021 y 2022, informó este miércoles la oficina de estadística comunitaria Eurostat.
El precio medio de los productos que los agricultores obtienen en la explotación disminuyó un 9 "notable ralentización" de las subidas de los precios agrícolas hasta lograr, por primera vez en dos años de incrementos, este descenso de los costes en el tercer trimestre de 2023.
Por productos, el precio medio de los cereales disminuyó un 32 %, con fuertes caídas para el centeno y el morcajo, el trigo, la espelta y la cebada, entre otros.
También bajó el precio de la leche, un 15 %; de la fruta, un 5 %; y las aves de corral, un 3 %.
Por el contrario, el aceite de oliva registró una fuerte subida de precio, con un incremento interanual del 73 %. También aumentaron los precios de las materias vegetales utilizadas para trenzado, un 50 %; de las patatas de consumo, un 30 %; y de la remolacha azucarera, un 44 %.
Entre los insumos no relacionados con la inversión, los precios más bajos correspondieron a los fertilizantes, que cayeron un 36 % respecto al tercer trimestre de 2022, la energía y los lubricantes, con un descenso interanual del 18 %, y los piensos, que se anotaron un 12 % menos.
Por países de la UE, los descensos más acusados se registraron en los Estados miembros más especializados en cereales y leche: Bulgaria (-28 %), Hungría (-26 %), Lituania y Letonia (-24 % en ambos) y Eslovaquia (-20 %).
En cambio, los precios aumentaron en seis países del sur de la UE, impulsados por el fuerte aumento del precio del aceite de oliva. Así, en Grecia crecieron un 22 %, en Chipre un 11 %, en Portugal un 8 %, en España y Malta un 5 %, y en Italia un 1 %.
De hecho, España registró el mayor aumento del precio del aceite, que entre julio y septiembre experimentó un aumento interanual del 103 %, seguido de Grecia, donde creció un 101 %; Portugal, un 99 %; e Italia, un 31 %.
En cuanto a los insumos no relacionados con la inversión, los mayores descensos en los precios se registraron en Lituania (-27 %) y los Países Bajos (-26 %), en tanto que en Malta fue el único país de la UE que registró un aumento (un 1 % más).