Puig admite que un municipio no puede asumir la solución de las desaladoras

El president de la Generalitat, Ximo Puig, ha afirmado que "la solución de las desalinizadoras no puede ser asumida directa y únicamente por los ayuntamientos" y ha ratificado que la Administración autonómica "va a apoyar siempre a los municipios valencianos".

Puig ha respondido así tras ser preguntado sobre la declaración institucional aprobada por unanimidad este martes en el pleno de la Diputación de Castellón para reclamar al Ejecutivo central que asuma el coste de estas infraestructuras ante la dificultad de costearlas por parte de las poblaciones más pequeñas.

En este sentido ha indicado que el Consell "va a apoyar siempre a los municipios de la Comunitat Valenciana" porque "es evidente" que la alternativa de las desaladoras "no puede ser asumida directamente por los ayuntamientos".

No obstante ha indicado que "también hay indicadores de carácter privado" y que se da una "situación que hay que consolidar, teniendo en cuenta que al final lo básico es que los ciudadanos tengan garantizado el derecho al agua".

Puig ha defendido que las desaladoras "son cada vez menos contaminantes y más eficientes desde el punto de vista energético y de la calidad del agua, y es evidente que se tiene que impulsar desde el Gobierno definitivamente esa solución".

Una solución que, a juicio de Puig, pasa por "una suma de acciones", como son las propias desaladoras, pero también la "reutilización de recursos hídricos, la modernización de sistemas de riego o el fomento del consumo responsable" para "cumplir el objetivo: agua para siempre".