Los exportadores citrícolas españoles piden medidas contra insecto transmisor de la bacteria HLB

Los exportadores citrícolas españoles ha pedido hoy más medidas para controlar la expansión del insecto vector que transmite la bacteria Huanglongbing (HLB), presente en Galicia y Portugal, ya que es un riesgo para una futura propagación de la enfermedad 'cítrus greening', que haría desaparecer al sector.

Fuentes del Comité de Gestión de Cítricos (CGC), que agrupa a los exportadores citrícolas, han afirmado que el avance de esta enfermedad, para la que no existe cura y que ha reducido un 25 % la producción en Florida (EE.UU), podría disminuir la nacional a la mitad en solo siete años y hacerla desaparecer en 15.

Han exigido "que se aceleren los trámites ya iniciados para la suelta inmediata en las zonas demarcadas por la presencia de este psílido de un parasitoide traído de Sudáfrica (Tamarixia dryi), que permite un control eficaz de la población de este insecto y cuya presencia es clave para frenar su expansión".

También han reclamado que se dote con "más fondos comunitarios y nacionales" a la investigación de esta plaga en centros como el IVIA y el Ifapa, dependientes de las administraciones regionales de Comunidad Valenciana y Andalucía, respectivamente.

"Ante la gravedad de la amenaza", el CGC insiste en que se "intensifiquen las medidas de control sobre las importaciones" comunitarias de plantas susceptibles de portar el vector y de extenderlo por las zonas productivas y evitar la entrada ilegal de yemas para injertar y de plantas contaminadas con HLB.

De acuerdo a sus datos, el insecto vector localizado en Galicia en 2014 y un año después cerca de Oporto (Portugal) -el Trioza erytreae- puede ser portador de la HLB africana, una variedad menos agresiva que la asiática presente en Florida, una región que ha pasado de ser una potencia mundial citrícola a producir 3,6 millones de toneladas.

Hoy, "cuatro años después, este psílido procedente de África ha recorrido la práctica totalidad del litoral atlántico" de la Península y se sitúa a 190 kilómetros de las plantaciones de cítricos de Huelva y a solo 170 km de las del Algarve, la primera provincia de agrios portuguesa, han añadido.

Para la organización, en España falta inversión en I+D contra la enfermedad y hay explotaciones minifundistas, sobre todo valencianas, con proximidad entre plantaciones, a lo que hay que añadir campos que no se vigilan ni cuidan, lo que aceleraría su futura expansión por la única gran área citrícola del mundo sin HLB.