Puig aboga por una 'reciprocidad real' en los controles fitosanitarios que permita al arroz valenciano competir en igualdad de condiciones

El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, ha apostado por establecer una "reciprocidad real" en los controles fitosanitarios internacionales que permita al arroz valenciano y a otras mercancías agrarias competir en igualdad de condiciones y con las mismas garantías que se les exigen "a otros productos que provienen de otras latitudes". 

Puig se ha pronunciado así durante la apertura de la jornada International Rice Forum Valencia organizada por AVA-Asaja, donde ha manifestado que desde el Consell esperan que no se potencien "medidas no leales" que perjudiquen a la competencia porque se han logrado avances recientes "gracias al conjunto de las organizaciones agrarias europeas".

El jefe del Consell ha solicitado, en este sentido, que la identificación del país de origen del arroz sea "absolutamente obligatoria" y no existan "atajos ante el consumidor", y ha reconocido que espera que las negociaciones para la reforma de la Política Agraria Común (PAC) no concluyan "con un resultado negativo para ninguno de los subsectores" que integran el ámbito agrario.

"Tenemos que trabajar juntos desde los instrumentos públicos y los institutos privados para buscar sinergias", ha proseguido Puig, quien ha añadido que es fundamental adaptarse "a los nuevos tiempos" porque el futuro transitará por la vía de la innovación.

El presidente ha mantenido que el arroz es uno de los símbolos identitarios más importantes de la Comuniat porque, más allá de su importancia económica, en algunas zonas del territorio valenciano "lo es prácticamente todo", por lo que ha subrayado que se le debe sacar "la máxima rentabilidad" para que la renta de los agricultores "sea mejor", informaron fuentes de la Generalitat Valenciana.

Puig ha señalado, asimismo, que las casi 800.000 toneladas de arroz que genera España representan "la cuarta parte del arroz que se produce en Europa" y que, de ellas, alrededor de 110.000 son valencianas, un producto que, tal y como ha defendido el president, "tiene un valor superior por prestigio, calidad y su capacidad intrínseca para situarse en los mercados".

El jefe del Consell ha subrayado además que jornadas como el International Rice Forum València, al que también ha asistido la consellera de Agricultura, Medio Ambiente, Cambio Climático y Desarrollo Rural, Elena Cebrián, son "extraordinariamente eficaces" para abordar "nuevos retos desde la innovación y la comercialización" a partir de un planteamiento "de debate".