El sector de bebidas espirituosas apuesta por entrar en casa por Navidad para frenar su caída

El sector de las bebidas espirituosas se aferra este año a la Navidad como última esperanza para amortiguar la fuerte caída en ventas de un 2020 nefasto y trabaja por entrar en casa ante la ausencia de fiestas, cenas de empresa y demás eventos fuera del hogar como consecuencia de la pandemia.

Con el ocio nocturno cerrado y la hostelería mermada por las restricciones de espacio y las limitaciones horarias, los fabricantes de bebidas alcohólicas confían en aumentar su actividad a través del supermercado, para mitigar un desplome de ventas que en volumen rondará el 40% a cierre de año.

Así lo ha explicado en declaraciones a Efeagro el presidente de la patronal Espirituosos de España, Bosco Torremocha, quien ha recordado que las discotecas, pubs, bares y restaurantes representan en torno al 70 % de su facturación en un año normal.

"El impacto de este 2020 es totalmente distinto a cualquier escenario pasado; la virulencia y la concentración de la caída de ventas por la pandemia nos colocan en una situación diametralmente distinta a la de otras crisis, cuando la afectación era gradual", ha asegurado.

En este contexto, las Navidades aparecen como un "clavo ardiendo" al que poder agarrarse y salvar un ejercicio difícil para el sector de los de espirituosos -bebidas que superan los 15 grados de alcohol-.

"Lógicamente, si la hostelería está mermada y la recomendación sanitaria es quedarse en casa con la unidad de convivencia, habrá que hacer un esfuerzo para trasladar la experiencia a ese ámbito", ha detallado Torremocha.

La estrategia ya se traslada a los lineales del supermercado, las licorerías e incluso las tiendas "online" de algunas marcas, y abarcan desde packs especiales que incluyen vasos y accesorios hasta promociones y descuentos, a los que se suman cofres "premium" enfocados al sector del regalo.

Un ejemplo ha sido la marca de ginebras Tanqueray, que se ha aliado con la plataforma de envíos Glovo para adjuntar gratis con cada pedido una botella pequeña de gintonic ya preparado (de 275 mililitros), un formato novedoso con el que pretende facilitar su consumo.

Otra consecuencia de ese intento de trasladar una parte del consumo de fuera a dentro del hogar es la oferta de cócteles a domicilio, en algunos casos incluso con "barman" incluido para servir en directo.

"Si la campaña de Navidad normalmente ya es importante, imagina en este 2020. Nuestro consumidor es exigente, marquista -el sector de los espirituosos se caracteriza en España por una baja penetración de la marca blanca- y da mucho valor a la experiencia", ha insistido Torremocha, quien ha considerado que las enseñas se han visto a "innovar" todavía más dadas las circunstancias.

Desde la patronal detectan que esta campaña navideña supone "una oportunidad" para explicar el proceso de fabricación de estas bebidas, elaboradas por la destilación de ingredientes naturales como la uva, la patata, la remolacha, la chufa, el hinojo o el jengibre, a las que se suman hierbas aromáticas, cítricos, cereales, frutas y azúcar, entre otros.

El máximo responsable de Espirituosos de España ha subrayado que los empresarios del sector se han visto obligados a gestionar casi sobre la marcha, y se ha mostrado crítico con las decisiones adoptadas por las autoridades en relación con la hostelería.

"Te cierran por decreto de la noche a la mañana, a los dos meses de crisis desaparecen 60.000 puntos de venta, y a día de hoy todavía no hay ninguna claridad sobre cuál va a ser el escenario la semana que viene", ha lamentado.

Según el informe socioeconómico de la patronal correspondiente al ejercicio 2019, el sector está compuesto por 3.800 fabricantes -la mayoría destilerías artesanales y concentradas en Galicia-, que venden anualmente más de 200 millones de litros y exportan cerca de un 40 % de su producción.

El consumo a nivel nacional fue de 210 millones de litros -dato que incluye también las bebidas de importación procedentes de otros países-, un 2,4 % menos que un año antes.

La estadística la lidera el wkisky, que representa el 24 % de todo el consumo, frente al 21 % de los licores, el 20 % de la ginebra y el 15 % del ron, lejos del brandy (9 %), el anís (6 %), el vodka (4 %) y el tequila (1 %).