Francia suprime junto a Alemania el aplastamiento y gaseado de polluelos

Francia será el primer país de la Unión Europea junto a Alemania en suprimir por ley a partir del 1 de enero la práctica del aplastamiento y gaseado de polluelos machos, que será reemplazada por una técnica que permitirá distinguir el sexo antes de que eclosione el huevo.

"Francia será el primer país del mundo, junto a Alemania, en poner término a la eliminación de polluelos machos. Es un avance que se esperaba desde hace mucho tiempo", dijo el ministro de Agricultura y Alimentación, Julie Denormandie.

En un comunicado, su departamento explicó que los ministros de Francia y Alemania se habían reunido en enero de 2020 con representantes del sector avícola y organismos de investigación para formalizar un acuerdo bilateral y poner en marcha otras alternativas.

Las discusiones continuaron con el objetivo de poner fin de forma definitiva a esta práctica y responder a las peticiones de consumidores y asociaciones de protección animal.

A partir del 1 de enero, todas las incubadoras deberán haber instalado o encargado máquinas de "sexado in ovo", que permitan eliminar los pollitos macho (las hembras se conservan como futuras gallinas ponedoras) antes de la eclosión del huevo.

Para respaldar estas medidas, el Gobierno francés ha previsto diez millones de euros para el sector dentro del plan de recuperación de la crisis, para ayudar a las empresas a invertir en estas máquinas.

Además, se va a llevar la cuestión a nivel europeo en el Consejo de Ministros de Agricultura de este mismo lunes, cuando se propondrá a la Comisión Europea que apoye esta iniciativa y anime a los Estados miembros a sumarse a él.

"El desarrollo y la aplicación de alternativas sostenibles al destino de unos 50 millones de pollitos machos procedentes de las incubadoras de Francia sigue siendo un reto importante para el sector de las gallinas ponedoras", indicó el ministerio en su nota.

El aplastamiento de crías macho ya se había prohibido en Suiza el pasado 1 de enero de 2020, pero el país permite sin embargo la eliminación por gaseado.

Al contrario que las hembras, los machos no pueden poner huevos y su crecimiento es más lento para la producción de carne, por lo que se les sacrifica sistemáticamente.

Con la nueva técnica, una cámara analiza el color del embrión desde que aparecen las primeras plumas, lo que permite distinguir el sexo. Así, los huevos de machos serán apartados y destruidos antes de que nazca el polluelo.