Frutos secos, cereales y legumbres

AVA-Asaja pide a la UE suspender el acuerdo arrocero con Myanmar y Camboya

martes, 4 de enero de 2022


Manojos de arrozal secandose Sulawesi Indonesia (Foto Intef)


La Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-Asaja) reclama a la Unión Europea que suspenda el acuerdo comercial EBA que mantiene con Myanmar y Camboya, por el cual concede ventajas a sus importaciones de arroz, antes de que termine la cláusula de salvaguarda el próximo 18 de enero de 2022.


La Comisión Europea adoptó esta cláusula en 2019 tras constatar el sector que el incremento exponencial de las importaciones de arroz índica procedentes de Myanmar y Camboya habían invadido el mercado comunitario y habían hundido la rentabilidad de los productores.


Sin embargo, AVA-Asaja denunció que Myanmar esquivó dicha cláusula de salvaguardia sustituyendo los envíos de arroz índica por arroz japónica –el tipo característico del campo valenciano– pasando de 31.500 toneladas en 2018 a 158.700 en 2020.


El responsable de la sectorial del arroz de AVA-Asaja, José Pascual Fortea, recuerda que llevan tres años reclamando a Bruselas que extienda la cláusula de salvaguarda tanto en el tiempo (más allá del 18 de enero) y que la aplique también al arroz japónica o redondo, debido a "las graves consecuencias que siguen amenazando con acarrear las importaciones asiáticas" sobre el sector arrocero europeo.


A medida que Myanmar y Camboya han recrudecido sus ataques al sistema democrático y a los derechos humanos, la reivindicación de la organización agraria se amplía para exigir la suspensión de todas sus concesiones al arroz con destino a la UE.


El arrocero y miembro del Comité Ejecutivo de AVA-Asaja, Miguel Minguet, ha trasladado estas demandas a la Comisión como vicepresidente del grupo del Arroz del Copa-Cogeca y acusa a la UE de "traicionar sus valores y sus principios fundacionales si sigue premiando con concesiones agrarias a países terceros, en este caso Myanmar y Camboya, que violan sistemáticamente los derechos humanos de su población".


"Ahora que finaliza el periodo de la cláusula de salvaguarda, Bruselas tiene la oportunidad de demostrar no solo que defiende a su sector primario, sino también que defiende la democracia", ha opinado.


Respecto a todos los acuerdos comerciales internacionales, Minguet denuncia "la discriminación que Bruselas impone a los arroceros europeos frente a las menores obligaciones, limitaciones y controles que se aplican a las producciones foráneas".


Por ello reclama que los tratados establezcan reciprocidad, que limiten las importaciones como complemento y no como sustituto del arroz europeo, y que consideren el arroz como producto sensible. 

PUBLICIDAD

SUSCRÍBETE A LA NEWSLETTER

ESTUDIO

PUBLICIDAD

PUBLICIDAD