La exportación de alimentos y bebidas eco ha crecido un 60% en una década

La exportación de alimentos y bebidas ecológicos españoles ha crecido un 60% en un periodo de 10 años, un mercado que no deja de crecer y que encuentra frenos como las certificaciones en países terceros como China.

Así lo ha puesto de manifiesto la directora de Internacionalización y Política Comercial Internacional de la Federación de Industrias de la Alimentación y Bebidas (FIAB), Verónica Puente, en declaraciones a los periodistas ante de su intervención en la Feria Organic Food Iberia en la que abordará los mercados emergentes para estos productos.

España, que es la segunda potencia europea en superficie ecológica certificada, exportó alimentos y bebidas por valor de 2.752 millones de euros en 2020, último ejercicio del que se han facilitado los datos.

Eso supone que el 43 % del total de los alimentos y bebidas con esta certificación se vende fuera, ha detallado Puente.

España, que es el cuarto país en exportación alimentaria ecológica, detrás de Estados Unidos, Italia y Países Bajos, vende al exterior fundalmentalmente aceite, vino, carnes y elaboraciones cárnicas, lácteos y conservas de frutas y verduras, un nicho este último en el que España "es muy fuerte".

Los mercados con mayor potencial son los "más maduros", ha reconocido la experta, que ve un importante freno para llegar a China el no reconocimiento por parte de ese país de la certificación ecológica europea, lo que requiere que sean sus propias autoridades las que acrediten a los alimentos con viajes y visitas aún bastante afectados por la pandemia.

Puente ha situado la entrada de los alimentos y bebidas ecológicos en las mesas de bares y restaurantes como una "palanca de crecimiento", un canal que aún es "minoritario" y que actúa como "puerta de entrada" para nuevos consumidores a este segmento del mercado.

En esta línea, el secretario general de la patronal Hostelería de España, Emilio Gallego, participó ayer en esta feria para asegurar que la incorporación del ecológico a la restauración tiene su contexto en la aparición de un cliente "mucho más preocupado" por su bienestar y su salud, una realidad que afecta a sus pautas de consumo.

"Este sector que siempre está a la escucha activa, está generando una oferta para estos clientes", aseveró, aun entendiendo la distancia que hay aún con otros mercados más maduros en el consumo de estos alimentos.