La federación de productores y exportadores de frutas y hortalizas Fepex ha mostrado su "preocupación" por el impuesto al plástico de un solo uso que entra en vigor en 2023 y se ha sumado así a otras organizaciones agroalimentarias que piden que se demore su aplicación un año.
En un comunicado, Fepex ha afirmado que este impuesto "afectará negativamente a la comercialización hortofrutícola" y ha resaltado que el Gobierno italiano recientemente ha aplazado su entrada en vigor, como ejemplo a seguir por el Ejecutivo español.
"España se queda sola en Europa con la introducción de un impuesto -no obligatorio para los estados miembros- que supondrá añadir sobrecostes a sus empresas en un contexto especialmente delicado", ha sentenciado.
Ha añadido que las asociaciones del sector que participan en la Asociación de fabricantes y distribuidores (Aecoc) disponen de informes e indicadores que, en los últimos años, constatan una reducción del 21 % del plástico utilizado.
También, que el 69,1 % del plástico que emplean es reciclable o reutilizable y que el 35,1 % del plástico de sus packagings o envases procede de plástico reciclado.
A su juicio, su entrada en vigor el próximo 1 de enero es "una medida especialmente perjudicial para las empresas de menor tamaño que, en el actual escenario inflacionista, tienen menor capacidad de maniobra".