La exportación hortofrutícola española cae un 10% en volumen y crece un 3% en valor en 2022

La exportación española de frutas y hortalizas cerrará 2022 con un descenso del volumen de entre el 8 y 10%, mientras que terminará el año con un aumento en valor en torno al 3%, según estimaciones de la Federación Española de Asociaciones de Productores Exportadores de Frutas y Hortalizas (Fepex).

Fuentes de Fepex han precisado que, en cifras, el volumen exportado de frutas y hortalizas frescas en 2022 superará ligeramente los 12 millones de toneladas, en tanto que el valor de las exportaciones se situará por encima de los 16.200 millones de euros.

Fepex ha indicado que basa sus estimaciones en datos del Departamento de Aduanas e Impuestos Especiales hasta el mes de octubre, a partir de los que realiza una previsión de los meses de noviembre y diciembre.

La asociación achaca la caída en volumen de los envíos al exterior a la climatología adversa, que ha provocado "todo tipo de incidencias".

Así, ha relatado que las heladas de la primavera supusieron una fuerte reducción de la fruta de hueso especialmente en Aragón y Cataluña, y que las incesantes lluvias durante los meses de abril y mayo en regiones eminentemente hortofrutícolas como Murcia convirtieron la primavera de 2022 en esta comunidad autónoma en la más húmeda en 62 años.

A ello, Fepex suma las olas de calor del verano que afectaron también a las producciones hortofrutícolas andaluzas.

Por todo ello, la asociación ha pedido "medidas específicas" para fomentar las inversiones que permitan hacer frente a esta climatología adversa.

En cuanto al aumento en valor de las exportaciones, Fepex ha indicado que este crecimiento "no permite compensar el incremento de los costes que ha asumido el sector", que en su opinión ha sido uno de los factores que más han marcado el año, "al igual que la creciente competencia de países terceros".

"Hasta octubre de este año las importaciones han aumentado un 7 % en volumen y un 14 % en valor impulsadas por las desventajas normativas ya que no están sometidas a los mismos requisitos productivos y comerciales que las producciones comunitarias, haciendo el modelo de la Unión Europea (UE) cada vez menos competitivo frente al de países terceros", ha expresado Fepex.

Además, la asociación ha lamentado que "la creciente globalización del mercado de la UE no va acompañada de una apertura real de nuevos mercados para los productores comunitarios".

A futuro, la asociación ve con preocupación "la disponibilidad de recursos hídricos" con los que se pueda contar en las regiones productoras, así como los cambios que se deriven de la normativa comunitaria relacionada con la Estrategia de la Granja a la Mesa, u el proyecto de reglamento de uso de fitosanitarios.

Fepex también ha mostrado preocupación por el impacto en la competitividad que pueda tener "la sobrerregulación de la actividad productiva y comercial provocada por un paquete normativo derivado principalmente de la nueva política agraria" y del proceso de transición ecológica que entrará en vigor en 2023.