"¿Superalimentos?, lentejas con arroz y vinagre"

Por encima de la quinoa, semillas de chía o cualquier comida de moda en los últimos años, bajo el término de “superalimento” habría que elevar a la cumbre un plato de lentejas con arroz y vinagre, algo básico de la gastronomía española que aporta todo lo necesario a una persona.

Es una de las clave que aporta Ángela Quintas a las dudas sobre la nutrición que pueden surgir a cualquier persona, que analiza en ‘¿Por qué me duele la tripa?’, el último libro de una experta en nutrición que lleva más de 15 años orientando a gente de toda España en su consulta sobre cómo llevar adelante su vida en buena sintonía con el aparato digestivo.

En una entrevista con Efeagro ha puesto sobre la mesa algunas de esas claves, con la premisa de que "los médicos tienen que comer, pero se puede vivir sin pastillas”, con un libro que usa un lenguaje llano, con el objetivo de “bajar el tono para que todo el mundo lo pueda entender, porque si usas terrenos que solo entiendes tú, entonces no tiene sentido”.

Para esta licenciada en Ciencias Químicas y máster en Dietética y Nutrición Humana, en el día a día se cometen demasiados errores relacionados con la nutrición, como “intentar normalizar el hecho de olvidar de las digestiones durante el día”, y asegura que cada día se encuentra a más gente que eliminan cosas de su nutrición “y se acostumbran a vivir hinchados, con diarrea o e estreñimiento”.

"Si no hay un consumo suficiente de fibra, agua y no me muevo, se tendrá que usar un laxante, pero hay que mirar las partes anteriores y analizar por qué se ha llegado hasta ahí”, explica Ángela Quintas, que sitúa al estrés como una de las causas de más problemas en la microbiota (el conjunto de bacterias que colonizan la piel, el aparato digestivo, incluida la boca, y el aparato genital), y recuerda factores como el consumo de determinados fármacos, sobrepeso, obesidad, consumo de alimentos ultraprocesados y la edad.

Además, se refiere a la recomendación de comer cinco veces al día, matizando que “no consiste en hacer grandes ingestas, pero sí en mirar lo que como y cómo lo como”, y llama la atención sobre que la digestión empieza en la boca, “y si como delante del ordenador engullendo la comida, eso ya lo estoy haciendo mal”.

Eso, además, en una sociedad en la que “comemos cosas que nos aportan kilocalorías vacías”, mientras que, en ocasiones, con una costumbre cada vez más arraigada de leer las etiquetas a la hora de hacer la compra, hay que defender que la cesta se llene de frutas y verduras, “y de esas no hay que leer etiquetas”.

Ángela Quintas se detiene a analizar los conocidos como “superalimentos”, pero los incluye en una dieta global, ya que “si por comerlos creo que lo tengo todo hecho, estoy equivocado. Lo hago todo mal y como semillas de chía”, dice, y defiende con ese nombre algo tan tradicional como un planto de lentejas con arroz y vinagre.

“El vinagre hace que el hierro no hemo se convierta en hemo y se puede fijar”, dice Quintas, que, en el caso de que a alguien no le cuadre echar vinagre sobre estas legumbres, recomienda que se sustituya por una naranja como postre.

"Está bien que haya médicos digestivos, a veces hay que usar medicación, pero muchas veces ponemos un parche sobre algo que estamos haciendo mal, como la manera de elegir los alimentos y el acto de comer”, explica la autora de ‘¿Por qué me duele la tripa?’, que cree que si hoy día se usase más la cocina y menos el teléfono para pedir comida, muchos de los problemas digestivos que hoy día se sufren irían desapareciendo casi sin darnos cuenta.