La panadería industrial, preocupada ante el alza de precios de los cereales y la energía

La industria de la panadería, bollería y pastelería industrial ha recuperado su buen funcionamiento, su mercado y espera igualar las cifras de antes de la pandemia, pero está ahora "preocupada por la tremenda subida de los costes" derivada del alza de los precios de cereales, electricidad y gas.

Así lo ha indicado el presidente de la Asociación Española de la Industria de panadería, bollería y Pastelería (Asemac), Felipe Ruano, antes de su presentación de las VIII Jornadas de Reflexión que esta organización ha celebrado esta mañana en la feria Intersicop en Ifema, Madrid.

Ruano ha explicado que, además de los cereales -principal materia prima para la elaboración de sus productos-, la industria panadera es una de las "grandes consumidoras de energía eléctrica", ya que es necesaria tanto para los" procesos de cocción, como para los de refrigeración y almacenamiento".

La industria de panadería y bollería "está viviendo esta subida de costes imprevistos con muchas dificultades porque es muy difícil trasladarla a un producto de consumo diario como es el pan o los bollos", ha afirmado.

Ha explicado que las empresas del sector "han tenido que ir absorbiendo a costa de su margen esos incrementos de costes", por lo que ha confiado en que "poco a poco se pueda ir recuperando la situación" en un sector que "llegó a la pandemia con mucha salud financiera, lo que hasta ahora le está ayudando a soportarla".

En la inauguración de la jornada, ha resaltado que los miembros de Asemac "no han fallado ni fallarán en alimentar a todos los consumidores con pan, bollos y pasteles todos los días, tanto en los años malos de 2020 y 2021 como en el que ha empezado de 2022, que en principio parecía que iba a ser muy bueno".

El secretario general de Asemac, Jorge de Saja, ha reconocido que este sector "nunca se había encontrado en una situación como la actual, en la que se ha recuperado la demanda pero se han salido de madre todos y cada uno de los costes de insumos de producción", entre los que ha mencionado "la energía, las materias primas o la logística".

La presidenta ejecutiva de la asociación de consumidores industriales de gas GasIndustrial, Verónica Rivière, ha calificado de "históricos" los precios de electricidad y gas que están soportando la compañías manufactureras.

"Hay gran incertidumbre por los fundamentos geopolíticos, de demanda y gestión del aprovisionamiento pero, sobre todo, por el conflicto en Ucrania con la entrada de las tropas rusas, que puede dar un gran vuelco a los mercados de gas y electricidad en toda Europa".

Ahora, "hay que ver qué se decide respecto a las sanciones que se impongan a Rusia y si este país va a seguir enviando gas a Europa".

A su juicio, "lo que no va a ocurrir es que España se quede sin aprovisionamiento", ya que cuenta con seis plantas de re-gasificación de gas licuado que llegue en barcos, más que ningún otro país europeo, y con la conexión por gaseoducto con Argelia.

La directora general de la consultora de mercados agrícolas Aestivum, Mercedes Ruiz, ha descrito que existen "más factores que impulsan hacia arriba los precios de los cereales y las oleaginosas que hacia abajo".

Hay "gran volatilidad y precios sostenidos en el mercado" de estas materias primas, en el que los grandes fondos han tomado grandes participaciones, ha indicado.

La crisis de Ucrania -el 40 % de maíz que importa España llega de ese país y Rusia es el principal exportador mundial de trigo- , la demanda China de cereales, el valor del cambio euro-dólar y del petróleo, las perspectivas de las próximas cosechas y las condiciones meteorológicas y sequías en las áreas de mayor producción son algunos de los condicionantes de la evolución de precios, ha mencionado.