España quiere extender el tratamiento en frío logrado para las naranjas a mandarinas y pomelos

El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, y el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, han destacado su disposición a seguir trabajando para extender el tratamiento en frío que se ha logrado que la UE acepte para las naranjas importadas de terceros países pueda también aplicarse a otros productos agroalimentarios.

Así lo han trasladado en rueda de prensa tras la reunión que han mantenido ambos en el Palacio de la Generalitat y en las que se han abordado cuestiones como la situación del sector citrícola y las inversiones contempladas en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia para la modernización de regadíos.

El presidente ha destacado el “éxito” de la aplicación del tratamiento en frío a las naranjas procedentes de terceros países como Sudáfrica y ha agradecido al ministro su implicación personal en las negociaciones en el seno de la UE para lograr instaurar este control fitosanitario.

El jefe del Consell ha subrayado que la consecución de esta medida supone un “paso adelante decisivo”, y un logro “que parecía que nunca iba a ser posible”, y ha defendido que, para la Generalitat, es ahora un objetivo extenderlo a otros productos agrarios como las mandarinas y los pomelos.

El sector citrícola es de gran importancia económica y social para la Comunidad Valenciana, donde aporta alrededor de un tercio de toda la producción agraria, con unos 1.200 millones de euros y cerca de 41.900 explotaciones, así como la política de regadíos sostenibles del Gobierno de España.

El ministro ha puesto en valor que el pasado 14 de julio entró en vigor la exigencia de tratamiento en frío para los cítricos, principalmente naranjas, de terceros países y donde está presente la plaga de la polilla del naranjo.

Un logro que ha contado con la implicación personal del ministro y con la máxima colaboración de la Generalitat. Un "éxito colectivo" que da respuesta a una "demanda histórica" para proteger las producciones agrícolas europeas, no solo los cítricos, frente a la entrada de nuevas plagas, indicaron fuentes ministeriales.

El sector de los cítricos ha atravesado una campaña muy difícil, agravada desde el inicio de la invasión rusa de Ucrania. Por ello, el ministerio destina 38,7 millones de euros de ayudas extraordinarias para el sector citrícola. De ellos, la Comunidad Valenciana percibirá 24,2 millones, lo que va a beneficiar a unos 30.000 citricultores. 

Así, una explotación media de cultivo de naranja, con 5 hectáreas, recibirá 1.500 euros. Se trata del único sector agrícola con este apoyo dentro de las ayudas del plan de respuesta a los efectos de la guerra de Ucrania. Las ayudas ya han sido distribuidas a las comunidades autónomas, que deberán pagarlas antes de final de septiembre.

El ministro ha señalado que “seguimos trabajando en la ‘hoja de ruta’ del sector citrícola para hacer frente a sus dificultades estructurales”. Este plan cuenta con 16 medidas que van desde la inyección de liquidez hasta la mejora de la comercialización y el funcionamiento de la cadena de valor y fue acordada, en abril de 2019, con el propio sector y las comunidades autónomas.

Luis Planas ha remarcado que “esta ‘hoja de ruta’ se está ejecutando conforme a los calendarios previstos”.

Luis Planas también ha hecho referencia al sector pesquero y al ‘”complicado” debate sobre la aplicación del reglamento comunitario que fija los objetivos de pesca y que, por tanto, puede ser un factor de riesgo para el sector. El ministro ha destacado la sostenibilidad ambiental que garantiza los stocks biológicos, la sostenibilidad económica y, muy especialmente, la sostenibilidad social que tan importante es desde el punto de vista de la identidad de un territorio como la comunidad valenciana.

Por eso, el apoyo a la pesca en el Mediterráneo se va a sustanciar en 6,6 millones de euros procedentes de fondos europeos destinados a compensar los días de reducción del esfuerzo pesquero. Son ayudas adicionales a los 0,20 céntimos para el gasóleo profesional y a los 1,4 millones de euros que han llegado a 500 beneficiarios de la comunidad valenciana para paliar el incremento de costes. 

83,6 millones para modernización de regadíos

El presidente ha destacado también la “gran oportunidad” que suponen para el sector agroalimentario los 83,6 millones de euros que recibirá la Comunidad Valenciana para la modernización de regadíos dentro del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia y que se plasmará en siete actuaciones fundamentales, con una primera fase ya en marcha que contempla proyectos por importe de 56 millones de euros.

A estas inversiones, se suma el apoyo que el Ministerio de Agricultura aporta al sector citrícola en la Comunidad Valenciana, con ayudas por importe de 24,2 millones de euros que llegarán a 30.000 productores. 

“Creemos profundamente en el sector agroalimentario”, que ha demostrado ser “absolutamente resiliente”, ha manifestado Puig, quien ha garantizado que la Generalitat trabajando, junto al Gobierno central, para consolidar un sector de gran importancia económica y social para la Comunidad Valenciana y para el conjunto de España.

“Necesitamos continuar en el proceso de modernización de regadíos” y seguir aplicando las políticas de eficiencia en el uso de los recursos hídricos, y “la posición de la Generalidad en este aspecto es clara, porque no estamos por la polémica, por las guerras del agua, y por batallas estériles; estamos por el acuerdo, por buscar puntos de encuentro, y, sobre todo, por garantizar agua para siempre”, ha subrayado además. 

Respecto a la política de modernización de regadíos, contemplada en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, que contará con inversiones público-privadas por valor de 700 millones de euros, la Comunidad Valenciana es la tercera más beneficiada, con un total de 83,6 millones de euros hasta 2026, según indicaron desde el MAPA.