La Comisión Europea busca proteger más las figuras de calidad del aceite de oliva

La Comisión Europea (CE) pretende aumentar la protección de los regímenes de calidad en la Unión Europea (UE) con su propuesta de reforma, que incluye las indicaciones geográficas del aceite de oliva virgen extra (AOVE).

Así lo ha puesto de manifiesto la responsable del registro de indicaciones geográficas de la UE de la Dirección General de Agricultura de la CE, Ewa Smolenska-Poloz, en una conferencia telemática organizada por el Congreso Mundial del Aceite de Oliva.

Smolenska-Poloz ha explicado que la Comisión ha propuesto revisar el sistema de denominaciones de origen (DO) e indicaciones geográficas protegidas (IGP) para facilitar su adopción en toda la UE y aumentar su protección como "instrumento de propiedad intelectual accesible a todos los productores de esos productos".

Entre las mejoras necesarias están la disminución de los plazos de registro y la armonización de las normas en todos los sectores, ha indicado la responsable, que ha mencionado también la lucha contra el fraude y la falsificación en la era digital, la dotación de más responsabilidad a las agrupaciones de productores y el aumento de la producción y el consumo sostenible de esos productos.

La propuesta de la Comisión se presentó en marzo de 2022 y ahora está siendo sometida al debate del Parlamento Europeo y el Consejo de la UE, con el objetivo de que en los próximos meses comiencen las negociaciones entre los legisladores y pueda haber una decisión a final de año, según Smolenska-Poloz.

El secretario ejecutivo de la Sectorial nacional AOVE con denominación de origen, José Manuel Bajo, ha criticado que, con esa reforma, se esté "expulsando" a ese sector de la estrategia agroalimentaria de la UE, al "sacarlo de la Dirección General de Agricultura de la CE y enviarlo a la Oficina de Propiedad Intelectual de la Unión Europea (Euipo)".

Está previsto que la Euipo pase a gestionar esas figuras de calidad en lugar de mantenerlas en el marco de la Organización Común de Mercados (OCM), dentro de la Política Agraria Común (PAC).

Smolenska-Poloz se ha limitado a decir que una de las novedades de la futura reforma será la "asistencia técnica" de la Oficina de Propiedad Intelectual, sin entrar en detalle.

Bajo, por su parte, ha instado a la UE a facilitar la competitividad del sector del aceite de oliva desde un punto de vista estratégico.

EL MAPA DE LAS DENOMINACIONES

En la UE existen 147 indicaciones geográficas de aceites y grasas, la mayoría de ellas de aceites de oliva procedentes de Italia, España, Grecia, Francia y Portugal, a las que se pueden sumar 9 nuevas solicitudes de registro.

Según datos de 2017 de la Comisión Europea, los aceites de oliva con sello de calidad sumaron 301 millones de euros en ventas y sus mercados fueron principalmente nacionales y en un 40 % internacionales.

Entre los países europeos productores de aceites y grasas, España representó el 25 % del valor y contribuyó al crecimiento en una tercera parte.

El subdirector general de Control de la Calidad Alimentaria y de Laboratorios Agroalimentarios del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA), Francisco Javier Mate, ha apuntado que hacen falta "más esfuerzos" para aumentar las ventas del aceite de oliva con denominación de origen, como ocurre con otros sectores.

Según el MAPA, en 2021 había 30 DO y una IGP de aceite de oliva español registradas en la UE (las más importantes por superficie son las DO Baena, Sierra Mágina y Antequera, y la IGP Aceite de Jaén), con otras dos en tramitación.

Ese año se produjeron 111.000 toneladas de aceite de oliva bajo esos sellos, el 8,5 % del total en España, y se comercializaron 31.000 toneladas, el 70 % en el mercado nacional y el 30 % en el internacional, por un valor total de 150 millones de euros.

En el proceso participaron 148.000 agricultores, 528 almazaras y 408 envasadoras, según los datos del Ministerio, que cifra en 866.000 hectáreas la superficie destinada a su producción.